martes, 29 de marzo de 2011

EL SERVICIO FORESTAL DE BALEARES DURANTE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA (1936-1939)

Al estallar la guerra civil española, el 18 de julio de 1936, las diferentes provincias que formaban el Distrito Forestal de Valencia, Castellón, Alicante y Baleares quedaron separadas, ya que las 3 provincias peninsulares se mantuvieron fieles a la II República, cosa que en Baleares sólo pasó con la isla de Menorca, ya que las islas de Mallorca, Eivissa y Formentera secundaron el levantamiento del General Franco.

Al quedar la isla de Mallorca separada de su distrito, el gobernador civil de Mallorca, el General García Ruiz propone a su pariente, el Ingeniero de Montes D. Guillermo Galmés Nadal, ocuparse del Servicio Forestal, cargo que inicia en febrero de 1937, atendido hasta ese momento por el Ayudante de Montes D. Cristino Corredor y Arana.

D. Guillermo Galmés Nadal, Ingeniero de Montes

Guillermo Galmés era natural de Manacor y ya había desarrollado parte de su vida profesional en la isla, ya que en febrero de 1.918 tomó posesión del cargo de Ingeniero Secretario de la Junta de Conservación de la Riqueza Forestal Privada de Baleares, puesto que ocupó hasta 1.920. La guerra le cogió de vacaciones en Mallorca, y no pudo volver a su destino profesional, en el Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias (IFIE) de Madrid.

Así que desde 1937 hasta el final de la guerra se encargó de la Jefatura de este particular Distrito, autodenominado Servicio Forestal de Baleares.




EL CUERPO DE AUXILIARES FACULTATIVOS DE MONTES (AYUDANTES DE MONTES)

El Cuerpo Auxiliar Facultativo de Montes, más comúnmente conocidos como Ayudantes de Montes, no tiene una historia fácilmente reconocible y bien documentada. Este Cuerpo es el antecesor de los Peritos de Montes, y actualmente de los Ingenieros Técnicos Forestales.

Los comienzos de esta profesión se inició allá por 1833, con las Ordenanzas Generales de Montes[i] donde esta profesión se denominaba genéricamente perito agrónomo de montes[ii]. Esta ordenanza fue el inicio jurídico de la administración pseudo-forestal española gestionada por los Comisarios de Montes, pero no fue hasta 1859 cuando por el Real Decreto de 12 de junio de 1859, quedaron suprimidas todas las Comisarías de Montes, y todas las atribuciones y deberes de las disposiciones vigentes encomendadas a los Comisarios pasaron a los Ingenieros de Montes. En cada provincia española se creó un distrito forestal, y así nació la administración forestal española.

En el Real Decreto de 10 de junio de 1868 se estableció una plantilla para la profesión y además fue la primera normativa donde se citó textualmente el término “Ayudante de Montes”. En esta época era necesario para ejercer la profesión tener el título de perito agrícola (preferentemente) o el de agrimensor.

Al año y por Decreto de 28 de agosto de 1869, se aprobaba el Reglamento para la organización y disciplina del personal subalterno de Montes, que fue el primer reglamento de la profesión.

Después de tantos años de existencia de la profesión de Ayudante de Montes al servicio al Estado y por Real Orden de 3 de julio de 1880 se creó el Escalafón[iii] de Ayudantes de Montes con 50 plazas y dos clases, los 20 primeros con un sueldo anual de 2.000 pesetas y los 30 segundos, con el de 1.500.

El CAFM se creó mediante el Real Decreto de 6 de marzo de 1903, y se formó con los Ayudantes de Montes y los Auxiliares de Ordenación que ejercían en esa época. La plantilla total estaba formada por 75 individuos.
Para ser nombrado Auxiliar Facultativo de Montes y tener derecho a ocupar vacante en el Cuerpo, era necesario: ser español, no tener defecto físico que impidiera la práctica de la profesión, tener cumplidos 23 años y no exceder de 30 en la fecha de la convocatoria (este requisito sufrirá variaciones en las diferentes convocatorias) y haber sido examinado y aprobado materias relacionadas con la profesión del cuerpo de montes[iv]. Es a partir de aquí donde se puede afirmar que nace la profesión totalmente independizada de la agronomía, ya que no era requisito tener el título de perito agrícola o agrimensor, sino pasar unas oposiciones donde se examinaban de materias específicamente forestales.

Auxiliar Facultativo de Montes. Cuenca 1915


Y finalmente, por Real Decreto de 24 de abril de 1905 se aprobó el Reglamento para la organización, servicio y disciplina del Cuerpo Auxiliar Facultativo de Montes, que sería el reglamento vigente hasta el final de la Guerra Civil Española. En la convocatoria de las primeras oposiciones al cuerpo[v] se publicó el temario y cuestionario para el ingreso. Este temario estuvo vigente sin variaciones durante las 6 convocatorias que se realizaron desde 1904 hasta 1928[vi].




[i] El 22 de diciembre de 1833, y mediante Real Decreto promulgado por la Reina Regente Doña María de Borbón, se aprobaron las Ordenanzas Generales de Montes, donde en su  Art. 230 especifica que ”... Fuera de los empleados hoy existentes, no se podrá elegir ó proponer ninguno nuevo si no fuere perito agrónomo ó agrimensor, de cuyos conocimientos necesitare la Dirección General.”
[ii] Más exactamente se denominó de 1833 a 1845 perito agrónomo o agrimensor, de 1845 a 1855 perito agrónomo y de 1855 a 1859 peritos agrónomos de montes en las comisarías y auxiliares agrimensores en los primeros distritos forestales que se crearon. De forma reiterada en toda la legislación forestal de 1833 hasta 1859 exigía que para ser Perito Agrónomo de Montes era necesario tener el título de Agrimensor.
[iii] El escalafón consiste en la lista de rangos en que se agrupan las personas integradas en una institución. Dichos rangos pueden definir funciones jerárquicas, administrativas, operativas, o ser tan solo un elemento honorario. Cada rango o cargo dentro de un escalafón puede ir acompañado de títulos, símbolos y distinciones, que dependerán siempre de la organización que lo defina.
[iv] Primer grupo (Elementos de aritmética, Elementos de álgebra, Elementos de geometría, Elementos de trigonometría, Elementos de topografía, Elementos de construcción y Dibujo lineal), segundo grupo (Elementos de historia natural -Elementos de botánica y Zoología aplicada-, Selvicultura, Elementos de legislación y administración forestal y Dibujo topográfico) y tercer grupo (Elementos de ordenación y valoración de montes, Xilometría y Dibujo de lavado).
[v] Gaceta de Madrid del 12 de agosto de 1904
[vi] Las siguientes oposiciones se hicieron después de la Guerra Civil Española (1940)

miércoles, 2 de marzo de 2011

LOS MONTES PROTECTORES DE MALLORCA, LOS GRANDES OLVIDADOS DE LA ADMINISTRACIÓN FORESTAL

Durante los años 1935 y 1936, por sendos decretos, se declararon 119 montes protectores en diferentes municipios de la isla de Mallorca, todos ellos ubicados en la Serra de Tramuntana, con un total de 28.553,26 ha. Los años en que fueron declarados (justo antes de la guerra civil) y una administración forestal exigua en la provincia de Baleares, llevaron al completo olvido de esas declaraciones, aunque estas figuras siguen vigentes en la actualidad.



Los montes que se declararon protectores pertenecían a los municipios de Alaró, Bunyola, Campanet, Escorca, Fornalutx, Mancor de la Vall, Pollença, Selva y Sóller en la declaración de 1935 y Banyalbufar, Calvià, Deià, Esporles, Estellencs y Valldemossa para los del año 1936.
Se iniciaron los trabajos en otros municipios de Mallorca (Algaida y Artà entre otros), pero el inicio de la G.C.E. truncó este impresionante trabajo de catalogación.

Recordar que la actual Ley de Montes dicta unas normas para estos tipos de montes y que la administración forestal debería "mimar" mínimamente estos montes.